El cerro San Bernardo se encuentra emplazado al este de la ciudad de Salta y es poseedor de uno de los mejores miradores naturales de la ciudad.
Forma parte de la Sierra del Mojotoro, cuya orientación norte-sur y gradiente altitudinal permiten una progresiva transición entre ambientes chaqueños y yungueños. Esta característica del ecotono nos habla de la presencia de elementos biológicos de ambos ambientes, y resulta quizás más notorio si observamos su flora y fauna.
La comunidad vegetal, puede especificarse como un bosque disetáneo deciduo que presenta especies de yungas como, entre otros, el cebil, el horco cebil, el lapacho rosado, la tipa blanca y el pacará, coexistiendo con especies típicamente chaqueñas como los algarrobos blancos y negros, los quebrachos blancos y colorados, el mistol, el yuchán y el guayacán.
En cuanto a la fauna nativa, resulta importante mencionar que existen 137 especies de aves registradas, que comparten hábitat con mamíferos como corzuelas, pecaríes de collar, zorros y comadrejas, reptiles como el caraguay, serpientes, culebras y lagartijas, anfibios como sapos y ranas, y numerosos artrópodos entre los que resaltan las numerosas mariposas.
Durante una travesía diurna, es común cruzarse con curiosas urracas y hasta 4 especies de inquietos picaflores e imponentes pavas del monte.
Los recursos naturales del cerro hasta hace poco eran aprovechados, puesto que era una zona de pastoreo de ganado. También era habitual la extracción de mantillo, como cantera de rocas de aplicación, extracción de leña y madera y cacería de subsistencia. Desde la creación de la Reserva Municipal “Cerro San Bernardo” se busca controlar la depredación (Ordenanza Municipal Nº 6134).
Recordá llevar tu basura. Nuestra comida puede cambiar los hábitos alimentarios de la fauna y afectar sus comportamientos silvestres.